Notas sobre una Clase Magistral

Notas sobre una Clase Magistral

Nashla Báez

Más Antropología

 

 Esta lucha tiene que ser creativa, mediática, simbólica y emotiva; y los universitarios somos expertos en esas cuatro cosas.(Ocarina Castillo:2010)

Ayer con lluvia y todo, presencié una clase como muy pocas he visto en mis andares universitarios, una clase que va más allá del título con el que se promocionó, dejó de ser Magistral para ser una clase dialógica y dialéctica que promovió la participación de los asistentes; fue una presentación que aunque se enunciaba “La Universidad que Queremos” no resultó un ejercicio utópico y onírico, la profesora Ocarina Castillo logró con una destreza casi poética apostar por una reflexión en torno a un articulo realizado por ella hace más de una década, en donde exaltaba tributos y necesidades de la universidad venezolana y expuso que luego de trece años coinciden, la diferencia solo radica en las categorías semánticas. 

La profe “Oca” nos habló de la necesidad que tienen las Universidades de interconectarse, explicó que esto no aplica solo a la tecnología, sino interconectarse en redes de conocimiento, esbozó los ejemplos del CENAMB, COMIR y CEM hablando del ambiente, la mitigación de riesgos y género como temas transversales que deben tratar los estudiantes universitarios, aquí hizo especial énfasis en la labor que realiza el Programa de Cooperación Interfacultades, sin embargo no olvidó la importancia de la interconexión tecnológica en este sentido, comentó además, la experiencia innovadora de las “Aulas Virtuales” y aprovechó de hablar cómo han cambiado los estudiantes ahora por las nuevas tecnologías de información y comunicación. 

Ocarina nos recordó a los presentes que el Maestro es quien enseña a pensar y además recalcó la importancia de aprender a aprender, pero sobre todo la importancia de aprender a desaprender. 

Durante la clase, exhortó a las autoridades universitarias que se plantearan la realización de un calendario concertado para las facultades para mejorar la movilidad estudiantil en la UCV. También esbozó la situación de los docentes universitarios, narró con preocupación el hecho de que la mayoría de los profesores de la universidad son jubilados y, sobre todo, mostró gran inquietud por no estar dejando una generación de relevo. 

Nuestra querida profesora, una Maestra como pocos, luego de asignar la tarea a los asistentes (que consistió en una invitación a las Mesas Académicas que el PCI tendrá la semana que viene), culminó la clase con un mensaje lleno de esperanza, un mensaje que me voy a tomar la atribución de repetir: 

"Que esta lluvia nos quite la desesperanza

q ue esta lluvia nos quite la inercia

q ue esta lluvia nos quite la rabia

q ue esta lluvia nos quite los miedo s

q ue esta lluvia nos quite las insatisfacciones cotidianas

y Vamos a Pedirle a San Isidro quite el agua y ponga el sol

y que con ese sol venga la luz,

venga el diálogo, venga el coraje,

vengan las ganas

y venga la disposición a que todos juntos

obreros, estudiantes, profesores y empleados todos juntos

construyamos la Universidad que queremos

que es la Universidad que este País se merece"

 

De esta manera, bajo el cielo gris de esa mañana lluviosa el puente Salvador Allende, se vistió de Academia, en el marco de la protesta gremial Universitaria, y concluyó así esta clase magistral que terminó siendo una obra maestra llena de esperanza.

Una Estudiante 

que asistió y se siente orgullosa

de su UCV y de sus profesores.